Beneficios de la Fibra
Seleccionar alimentos ricos en fibra es muy saludable para nuestro organismo y bienestar. Hay un gran número de ellos que la contienen, por este motivo, si los agregamos a nuestras comidas, podemos prevenir algunas enfermedades. En muchas ocasiones, pensamos que solo afecta al peso, sin embargo, también ayuda a controlar el colesterol y la diabetes.
Para conocer los beneficios de la fibra es importante profundizar en los diferentes tipos que existen. Saber cuál es la cantidad recomendable y qué alimentos son más ricos en este carbohidrato son algunas de las dudas que vamos a despejar. Por todos es sabido, que las verduras, frutas o legumbres tienen un alto porcentaje, sin embargo, tenemos más opciones para mantener un peso saludable y una buena salud.
¿Qué es la fibra?
La fibra alimentaria se caracteriza por ser un carbohidrato de gran interés para nuestra alimentación. De hecho, forma parte de los macronutrientes más importantes que debemos incluir en la dieta. A diferencia de otros comestibles, no puede digerirse ni ser absorbida por el intestino delgado, por lo que sufre una fermentación parcial o total dentro de este.
Los expertos recomiendan el consumo de 30 gramos de fibra al día en la población adulta. Normalmente, las personas consumen un porcentaje inferior al indicado. Sin embargo, todas aquellas que se preocupan por añadirla, se ven muy favorecidas. El motivo principal es que se promueve el crecimiento de bacterias saludables y se protege el desorden gastrointestinal.
Tipos de fibra alimentaria
Hay una clasificación de la fibra alimentaria para comprender mejor el funcionamiento de este compuesto natural, que carece de nutrientes, aunque es clave para garantizar una alimentación saludable. En función de la solubilidad podemos conocer cómo interviene en los distintos procesos y ayuda a controlar la glucemia.
- Fibra insoluble. En este grupo están aquellos alimentos que prácticamente no absorben agua. Lo más normal es que estén compuestos por almidones resistentes y no se descompongan. Su principal trabajo es eliminar los desechos adheridos a las paredes intestinales y ayudar a ir al baño. Entre estos alimentos se encuentran el salvado de trigo y los cereales.
- Fibra soluble. En este caso, nos referimos a los alimentos que retienen agua y se caracterizan por formar una gelatina viscosa. Se fermentan casi en su totalidad, por este motivo, suelen ocasionar gases. Este tipo de fibra es muy habitual en las legumbres, avena, cebada y algunas frutas.
Funciones de la fibra alimentaria
Debido a que la fibra tiene una serie de propiedades muy beneficiosas para el organismo, lo mejor es conocer cuáles son sus principales funciones. De esta forma, sabremos cómo incluirla en la alimentación para regular mejor los procesos del aparato digestivo.
- Regulación del tránsito intestinal. Principalmente, esta es la función que todos conocemos, puesto que al retener agua se consigue aumentar el volumen de las heces para su fácil expulsión.
- Evita las bacterias. Otra de sus características es que mejora la composición bacteriana y evita la proliferación de patógenos. Junto con otras sustancias nutritivas, equilibra y regula la función intestinal.
- Mejora la glucemia y colesterol. Hay estudios que sostienen que la fibra soluble sirve para regular los niveles de glucemia y colesterol.
- Sensación de saciedad. Por último, cuando se trata de hacer una dieta es muy recomendable, puesto que genera una rápida sensación de saciedad.
- Mejoría en el colon. Por último, tenemos que destacar que reduce el PH en el colon, de tal forma, que se previene la aparición de pólipos.
Principales alimentos como fuentes de fibra
Una vez que ya conocemos sus propiedades y funciones, lo mejor es elegir correctamente los alimentos ricos en fibra. En cualquier dieta sana y equilibrada es necesario incluirla, sobre todo, para favorecer la digestión y mejorar el tránsito intestinal.
- Legumbres. Un aporte semanal de lentejas, alubias, guisantes o garbanzos es muy apropiado. Contienen entre un 11 % y 25 % de fibra, por lo que son altamente recomendables.
- Cereales y harinas integrales. Los cereales integrales son los más recomendables, como la avena, el trigo, la cebada o el centeno, porque la semilla de la cáscara es de celulosa. Este es uno de los componentes más importantes de la fibra.
- Frutas. Sin duda alguna, consumir frutas frescas también es muy importante. Los expertos aconsejan que tengan piel. Las más ricas en fibra son los cocos, moras, frambuesas, arándanos, fresas, plantas, manzanas y peras.
- Verduras. Las que principalmente destacan son la lechuga, acelga, zanahorias y espinacas. Asimismo, las alcachofas, calabazas o remolachas pueden ser muy aconsejables.
- Frutos secos. Por último, no podemos pasar por alto los beneficios de los frutos secos. En esta categoría se recomiendan almendras, nueces, pistachos y semillas de girasol.
En resumen, los beneficios de la fibra son múltiples y ayudan a prevenir bastantes enfermedades. Si te gusta ayudar a mejorar la salud de las personas con una alimentación adecuada, te recomendamos hacer el Grado Superior en Dietética a distancia de FP. En caso de dudas, sobre los requisitos para acceder y la matrícula, no dudes en solicitar más información.