Piel de naranja: Qué es y cómo eliminarla
A pesar de la creencia popular, la piel de naranja no es solamente una molestia a nivel estético, sino que también puede ser una señal de padecer problemas de salud más serios, como retención de líquidos o dificultades en el sistema circulatorio sanguíneo o linfático.
La piel de naranja o celulitis, es el resultado de la acumulación de tejido graso bajo la piel, que puede llegar a formar bultos u hoyuelos dando a la piel una textura irregular, que además de ser considerada un problema estético, puede llegar a provocar dolor al tacto. Existen diferentes tipos de celulitis, que se clasifican según el origen de esta o dependiendo de si esta dolencia se encuentra en un estado avanzado o no.
En este artículo, trataremos de explicar brevemente qué es la piel de naranja, además de recomendar cómo prevenirla o tratarla cuando sea necesario
¿Qué es la piel de naranja? Tipos de celulitis
Se conoce coloquialmente a la piel de naranja, como el resultado visible a la hora de padecer celulitis, ya que los hoyuelos que se pueden ver en la zona afectada y al tacto, recuerdan a la piel de esta fruta. Es una dolencia que afecta a más del 80% de mujeres en algún momento de su vida, mientras que los casos masculinos rondan solo al 10% de la población.
La celulitis puede tener un origen hereditario, deberse a factores hormonales o, lo que se considera más común en la mayoría de los casos, ser el resultado de unos malos hábitos alimenticios o un estilo de vida sedentario.
La piel de naranja suele aparecer de manera concentrada o dispersa en las zonas bajas del abdomen, glúteos, muslos o piernas, y pueden clasificarse en tres tipos bien diferenciados que enumeraremos a continuación, según el estado o fase en el que se encuentre la celulitis:
- Dura: Suele afectar a personas más jóvenes y está relacionada directamente con los hábitos alimenticios. La piel de naranja suele estar concentrada en una zona y presentar un tacto duro y firme, llegando a doler al roce.
- Flácida: Es el tipo de celulitis o piel de naranja es la más común en toda la población, y la que suele afectar más a nivel estético. Afecta de manera más extendida y al contrario que en el primer caso que hemos visto, la zona es más blanda y sensible al tacto. Puede provocar dolor y favorecer la aparición de varices.
- Edematosa: Este último caso, suele darse en personas de más avanzada edad, y es el resultado de una mala circulación sanguínea y linfática, o también por retención de líquidos. Suele concentrarse en la zona de las piernas y muslos, y venir acompañada de la aparición de varices. Para más inri, este tipo de celulitis puede provocar una disminución en el tono muscular.
¿Cómo prevenir la piel de naranja?
Existen una gran variedad de formas de prevenir esta molesta afección, reducir su extensión o evitar que avance a la siguiente fase, para así no tener que aplicar tratamientos más agresivos para eliminar la piel de naranja. A continuación, haremos mención a las cuatro formas más comunes de evitar ser víctimas de la celulitis.
- Ejercicio: Llevar un estilo de vida activo y practicar algún tipo de actividad física de manera regular, es una indiscutible forma de llevar un estilo de vida saludable y así evitar problemas circulatorios que pueden derivar en sufrir la piel de naranja. Pero es que además, existen ciertos tipos de ejercicios específicos y recomendados para trabajar más en la zona baja del abdomen, glúteos y piernas para así favorecer la circulación sanguínea y linfática de las principales zonas donde aparece la celulitis.
- Alimentación: Al igual que el ejercicio físico, la alimentación siempre está ligada a un buen estado de salud, y por supuesto, también es un factor determinante a la hora de prevenir la piel de naranja. Existen una serie de alimentos que los expertos recomiendan para combatir esta afección, en especial muchos tipos de cereales, frutas y verduras, como los vegetales de hoja verde, el kiwi, la pera, los cereales integrales o la avena, que además de aportar todos los beneficios de la fibra, nos ayudarán a mantener a raya la celulitis.
- Crema y geles anticelulíticos: En el mercado, podemos encontrar una gran variedad de diferentes tratamientos dermatológicos que nos ayudarán a prevenir y frenar el avance de la piel de naranja, normalmente en forma de crema o gel. Siempre es recomendable aplicarlos con diferentes técnicas de masaje para estimular la circulación de la zona afectada.
- Dejar de fumar: Aparte de todos los perjuicios conocidos que conlleva ser un fumador, es importante recordar que el tabaco afecta a la circulación sanguínea, por lo que existe una relación directa entre la piel de naranja y este mal hábito.
Tratamientos para la piel de naranja
Lógicamente, la mejor forma de combatir la celulitis o piel de naranja es prevenirla, pero cuando ya es demasiado tarde para tomar esta opción, existen una gran multitud de formas de hacerle frente. Afortunadamente, en los últimos años y gracias a los grandes avances en la tecnología y la dermoestética, han aparecido nuevas técnicas y herramientas para eliminar esta incómoda afección.
A continuación, enumeraremos las técnicas más comunes para combatir la piel de naranja. Cabe destacar, que dependiendo del caso, el tipo de celulitis o donde se ubique esta, habrá tratamientos más o menos efectivos que otros.
- Presoterapia: Se trata de una de las técnicas más comunes que consiste en ejercer presión en las zonas afectadas a través de diferentes herramientas como bandas o fajas, con el fin de estimular y favorecer la circulación y el sistema linfático, para que nuestro mismo organismo se encargue de drenar y eliminar líquidos por sí mismo.
- Ondas de choque o electromagnéticas: Técnicas más modernas que consisten en aplicar ondas acústicas o electromagnéticas, dependiendo del tratamiento, para así, a través de vibraciones o la contracción de los músculos, afectar al tejido adiposo afectado por la celulitis, favorecer la circulación y así combatirla.
- Mesoterapia: Uno de los tratamientos más populares y efectivos para tratar la piel de naranja, aunque ligeramente más invasivo que otros, consiste en inyecciones subcutáneas de una solución que acelera la circulación sanguínea y linfática para que así nuestro organismo elimine las toxinas y la grasa.
Estos son solo algunos de los métodos y técnicas para combatir la celulitis o piel de naranja, pero como ya hemos mencionado anteriormente, existen una gran variedad de formas de prevenir y combatirla, desde remedios naturales hasta tratamientos más invasivos como la carboxiterapia, o la liposucción quirúrgica.
Además, y como mencionamos anteriormente a la hora de prevenir la piel de naranja, es recomendable combinar este tipo de tratamientos con ejercicio y una dieta saludable. Pero recuerda siempre consultar con un entendido en nutrición y dietética en caso de que vayas a someterte a algún tipo de régimen o dieta específica para combatir la celulitis, como un profesional experto titulado como Técnico Superior en Dietética en Madrid, que podrán asesorar como es debido en cuestiones de nutrición, y diseñar una dieta específica que se adapta a cada caso.